Proforma 2026: por qué el presupuesto para universidades parece aumentar… y también disminuir
¿Qué sucedió?
La Asamblea Nacional aprobó el 29 de noviembre la Proforma Presupuestaria 2026 y reactivó el debate sobre el financiamiento a las universidades públicas. Mientras el Gobierno asegura que el presupuesto aumenta, algunos legisladores, rectores y actores sociales sostienen que disminuye.
La discrepancia no surge de cifras distintas, sino de métodos distintos de comparación.
En pocas palabras
- Si se comparan proformas 2025 vs. 2026 (como hace el Gobierno): hay aumento.
- Si se compara el presupuesto codificado 2025 vs. la proforma 2026 (como hacen actores sociales): hay reducción.
- Ambas lecturas son válidas, pero responden a preguntas diferentes: planificación futura vs. ejecución actual.
Antes de comparar: qué mide cada documento
- Proforma (planificación): Presupuesto que el Gobierno propone para el próximo año. Es un documento de planificación que indica cuánto se espera recibir y cómo se planea gastar, pero aún no es dinero asignado.
- Presupuesto codificado (realidad del año en curso): Valor asignado en el año en curso. Comienza con la aprobación inicial, pero puede ajustarse (aumentar o disminuir) durante el año según necesidades, emergencias o ingresos adicionales.
Por eso, comparar dos proformas mira el plan futuro, mientras que comparar el codificado vigente con la próxima proforma muestra la realidad actual frente a lo planificado. La proforma, una vez entra en vigencia, se actualiza, se ajusta y se mueve. Es decir, el monto planeado puede cambiar en la práctica, explica a Lupa Media Leonardo Gómez Ponce, periodista especializado.
Cómo calcula el Gobierno el presupuesto universitario
Comparación de proformas 2025-2026:
El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) señala que, según la Proforma 2026, las universidades recibirán un mayor financiamiento. Para eso compara la proforma de 2025 con la de 2026 y considera cuatro rubros: Fondo Permanente de Desarrollo Universitario y Politécnico (FOPEDEUPO), gratuidad, funcionamiento y compensación.
Con esta metodología, el aumento proyectado es de USD 59,8 millones (o USD 58,6 millones excluyendo posgrados y universidades cofinanciadas).

Valores no ejecutados:
A diferencia de otras entidades, las universidades pueden acumular saldos no ejecutados y utilizarlos el año siguiente, según la Ley Orgánica de Educación Superior. Estos montos no aparecen en la proforma inicial, pero sí se suman luego al presupuesto de cada institución

Reducciones puntuales:
Aunque el total aumenta, cinco universidades sí presentan disminuciones en la comparación entre proformas:
- Universidad Intercultural de las Nacionalidades y Pueblos Indígenas Amawtay Wasi – ( menos USD 4.59 millones)
- Universidad de las Fuerzas Armadas ESPE – ( menos USD 4.56 millones)
- Universidad Central del Ecuador – (menos USD 2.26 millones)
- Universidad Estatal Península de Santa Elena – (menos USD 2.08 millones)
- Universidad Técnica del Norte – (menos USD 1.06 millones)
Las otras 26 instituciones registran aumentos, que van desde USD 110 mil hasta USD 8,58 millones.
Otro enfoque: comparar presupuesto codificado 2025 vs. proforma 2026
Si se compara la proforma del próximo año con el presupuesto codificado a septiembre de 2025, se observa una reducción de USD 129 millones en 18 universidades.
Según el Ejecutivo, este método “no refleja la realidad” porque los saldos no ejecutados aumentarán automáticamente el presupuesto del siguiente año.
Para Andrés Altamirano, del Observatorio de Gasto Público, comparar lo real con lo planificado ofrece una fotografía más cercana a la situación financiera de cada institución.
En esa misma línea, los economistas Mauricio Pozo y Alberto Acosta sostienen que la comparación más precisa sería entre presupuestos ejecutados de años similares. Esa metodología permite evaluar con mayor exactitud cómo cambia la asignación real de recursos, porque se basa en lo efectivamente gastado, no solo en lo presupuestado o planificado.
Entonces… ¿sube o baja el presupuesto universitario?
Depende de qué se compare:
- Proformas 2025 vs. 2026 (Gobierno):
El financiamiento global aumenta, aunque cinco instituciones reciben menos. - Codificado 2025 vs. proforma 2026 (actores sociales, rectores y oposición):
Varias universidades muestran reducciones frente a lo que efectivamente han ejecutado este año.
En conclusión, las cifras no se contradicen: responden a preguntas diferentes.
La disputa está en qué fotografía se utiliza para medir: ¿el plan del próximo año, la realidad actual o lo realmente gastado?
Fuentes:
Citadas en el texto