
Manual de buenas prácticas de IA para estudiantes
¿Qué es la IA generativa y cómo funciona?
Hoy existen múltiples programas de IA para proyectar, analizar, construir o generar información. La más popular es la IA generativa, como ChatGPT, Gemini o Claude, que funcionan procesando información de millones de fuentes para crear textos, resúmenes, explicaciones o ideas.
Pero ojo: la calidad de la respuesta depende directamente de cómo formulas el prompt (la instrucción que le das).

¿Cómo escribir un buen prompt?
Según Diego Palacios, editor digital de la Universidad de las Américas, hay tres pasos clave:
- Asignar un rol a la IA. Por ejemplo, decir que es un experto en matemáticas, humanidades, relaciones internacionales, etc.
- Dar contexto. Mencionar época, lugar o datos concretos para afinar la respuesta. Por ejemplo, la Revolución Francesa, el conflicto armado interno en Ecuador, la Convención de Viena, etc.
- Escribir la pregunta o requerimiento. Usar verbos claros según la necesidad:
- Resumir, para condensar información.
- Explicar, para aclaraciones de temas complejos.
- Crear, para desarrollar ejercicios que ayuden a comprender mejor la temática.
- Comparar y/o contrastar, para analizar los elementos en común y/o diferentes.
- Planificar, para diseñar planes de estudios o estrategias que apoyen en el aprendizaje.
Con los pasos anteriores se obtienen respuestas más precisas. Por ello, a pesar de que es una herramienta rápida hay que tener paciencia para que brinde información y apoyo lo más acertado posible.

¿Las respuestas son 100% confiables?
No. Es importante recalar que, la IA no posee el conocimiento absoluto. Siempre hay un margen de error que se puede dar por varios factores: mala interpretación del pedido, omisión de un dato, falta de claridad en el prompt, búsqueda en fuentes sin verificar, falta de actualización del modelo, alucinaciones etc. Por ello, siempre se debe contrastar y comparar lo que ofrece la IA con fuentes académicas, como los libros escolares o los profesores.

En el prompt también se debe detallar el tipo de información que se quiere recibir. Se puede pedir que:
- La información provenga de fuentes académicas, directas y/o verificables, para obtener datos compartidos por expertos en la materia.
- La información haya sido publicada en los últimos cinco años, así se obtienen datos recientes y comprobados.
- Compare las fuentes en su base de datos o brinde las que presentan menos sesgos o inconsistencias.
- Junto a cada párrafo o argumento incluya el enlace de la fuente donde obtuvo la información.
Aquí se debe realizar un trabajo manual para entrar a cada enlace y comprobar que fue publicado por una página confiable, como institutos, expertos, medios de comunicación reconocidos, diccionarios e enciclopedias, bibliotecas y revistas académicas. Incluso, se le puede preguntar a la IA por qué consideró que las fuentes presentadas son confiables.
¿Para qué más puedo usar la IA?
La IA también puede ayudar a generar planes de estudio previo a los exámenes. En el caso de las materias sociales y de humanidades, como historia, sociología, literatura, filosofía y arte, se pueden pedir resúmenes y esquemas que condensen la información más relevante a recordar. Esta información se puede presentar en mapas mentales, diagramas, tablas o en el formato que se le indique a la IA.

En el caso de las ciencias exactas, como matemáticas, química, física y económica, se pueden pedir ejercicios para practicar y una posterior explicación de cómo llegar al resultado.
Consejos éticos
Carlos Charanchi, docente de ciencias naturales, exhorta a que no se pida a la IA que realice el trabajo por el estudiante, ya que puede entorpecer la actividad educativa. Propone que se vea a la IA como una aliada adicional al «hacer un análisis exhaustivo de cada una de las cosas que la inteligencia artificial nos brinda para poder ir más allá”.
Isabel Guevara, profesora de matemáticas, considera que los alumnos deben aprender a citar correctamente las fuentes que les ofrece la IA porque, de lo contrario, pueden caer en el plagio, lo cual tiene repercusiones académicas serias. Esto es algo que se puede incluir en el prompt. Por ejemplo, «cita las fuentes académicas de acuerdo al formato de APA séptima edición».
Jorge Cruz, investigador del Observatorio de Comunicación de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador, propone potenciar el pensamiento crítico y el aprendizaje con las respuestas que da la IA al preguntarse:
- ¿Por qué buscó estas fuentes?
- ¿Por qué escogió este ángulo?
- ¿Qué habría escogido yo?
No debemos confiar ciegamente en la IA, ya que puede limitar nuestra creatividad y pensamiento crítico. ‘¿Cuándo uno se vuelve creativo?’, pregunta Diego Palacios. ‘Cuando enfrenta un desafío y busca mecanismos propios para resolverlo’. La IA ofrece conocimiento rápido y accesible, pero eso no significa que debamos aceptarlo sin cuestionarlo. Siempre es fundamental generar y desarrollar nuestro propio pensamiento
¿La IA puede funcionar como profesor particular?
Isabel Guevara, cree que la IA sí puede funcionar como un profesor adicional ya que brinda explicaciones y ejemplos de la vida real con los que clarificar las dudas de los estudiantes. Sin embargo, esto no implica que vaya a reemplazar a los docentes en un futuro, pues carece de tacto humano. “El trato, la preocupación, el seguimiento y conocimiento de cada estudiante hace la diferencia para que tengan éxito o no, le guste la materia o no”, comenta Guevara. Por su parte, Charanchi recuerda que los docentes son “mediadores del aprendizaje. Planteamos actividades y vamos mediando porque los chicos hoy tienen todo para poder generar sus propios conocimientos, pero necesitan acompañamiento”.
Fuentes:
Entrevista a Diego Palacios, editor de Contenidos Digitales en la Universidad de las Américas
Entrevista a Jorge Cruz, investigador del Observatorio de Comunicación de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador
Entrevista a Carlos Charanchi, docente de ciencias naturales
Entrevista a Isabel Guevara, profesora de matemáticas